Supongo que a estas alturas, guerra de Ucrania de por medio, todos hemos oido hablar de los drones turcos Bayraktar TB2, usados por las fuerzas armadas ucranianas con frecuencia para combatir los tanques rusos. Ya habían adquirido cierta fama por su uso durante la guerra civil Libia (por cierto ¿sigue habiendo guerra en Libia?) y en el conflicto reciente entre Armenia y Azerbayan, pero la guerra en uno de los límites de Europa los ha vuelto muy populares.
Y así, un poema proxifuturista de mi La balada de los drones (y otros poemas de la Gran Transición) pasa a convertirse en uno de «realismo social», y debo confesarles que no me pone nada, pero nada, contento. Aquí se los dejo:
V
Entra en la cabina,
ajusta los controles y en la medida que puede
se acomoda.
En el mapa brilla
el objetivo
y lo ve moverse en pantalla
en tiempo real.
Ajusta la mira,
marca,
pide aproximarse mas.
De algún modo que no acaba de entender
en su cara
siente el aire
y el fervor del vuelo
lo acomete.
Dispara:
observa el trazo del misil
y ve el humo del impacto
aunque no le llegue un ruido.
Objetivo eliminado:
otra comprobación
mas cerca:
se recuentan los cuerpos
desparramados.
Suelta los mandos,
abre la cabina,
se seca el sudor,
estira cervicales y hombros,
va a tomarse un cafecito con los compañeros de oficina
del cuartel general.
islas en la red 
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